20080809

A veces se piensa el mar
como océano de borbotones salinos
que ondea cicatrices sobre las arenas,
pero aún no digo nada de tus ojos...

A veces se desea la noche
como escaparate de lejanas estrellas
que andan esquivando una caótica luna,
pero aún no digo nada de tu pelo...

A veces se teme la tormenta
como estado convulso de los cuerpos
que trae placer y lluvia de sarmientos,
pero aún no digo nada de tu voz...

Y ahora, que aún no digo nada,
casi muerto, el poeta, el dicente...
yo te recuerdo en bahías de silencio
donde espera, extraño, el universo

Porque aún no digo nada de tus ojos...
Porque aún no digo nada de tu pelo...
Porque aún no digo nada de tu voz...

Pero un dia cualquiera,
hoy mismo,
ante la nube baja
de escombros ciudadanos,
o insecto perviviente
por entre las yerbas
puede ser posible
inconvenientemente
que Atila, terror del mundo,
mueva una mano enferma,
despacio, transido, amargo...
y amante,
ponga letra por letra:

Yo, que temo el mar...
Yo, que pienso la noche...
Yo, que deseo la tormenta...

Que aún no he dicho
casi nada de tu voz...
de tus ojos, ni tu pelo...

Y sin decir casi nada,
reclamo tu cuerpo, tu pelo,
tu voz, tus ojos, y quiero
que vuelva la primavera...

20080617

hoy no tengo un pretexto
que tal vez sea un acierto
hoy tengo un sentido ácimo y ciego

mis dunas resisten al viento
y en el empeño
crecen a mayor obstáculo al aéreo

sobre mis crestas avanzan diminutos manantiales
vienen del mar
son hijos de anteriores tormentas

en mis ondas sobreviven mitos y leyendas
que nadie crea,
en ellas se orean catástrofes humanas

alimento matojos y herbazales
que vienen en ser praderas ralas
de la marisma ferviente que antaño hubiera

sobre mí planean canículas y aves
soy playa y no soy desierto,
bienhallada sea la noche que me iguala con la luna

soy fuerte porque soy inasible
por eso no soy nada
soy infinito, soy incontable, soy inexacto

y aquí orillado en la galerna
sólido como un sueño, avanzo
ya nada me para, ya no soy mar, y soy mar adentro

me reúno, auno, ayuno
y voy con tempestad maldita
donde nada me detenga, me contenga, ni quizá me tenga

soy el creciente que nadie espera, la semilla del tiempo nuevo
dará igual la cosecha:
la envidia de Caín volverá matar la inocencia

20080607

Su Risa

-Me puedo morir sabiendo
que como el amor
la mar son olas que van
y vienen
y caracolas
que no hablan solas,
y las playas infinitas...
como el fondo de sus ojos,
atracados en bahías,
al resguardo de los soles
que destellan en su risa...

-Me puedo morir, sabiendo
que como el amor...
la vida es tierra esplendorosa
donde el aire de de la brisa
trae olores de tempestades
y flores de las marismas...
donde las mismas aves
que cortan en el cielo
con su aleteo
las nubes que se atraviesan...
traen el agua que fecunda
aguas, bosques y cultivos,
y avenan las tristes almas
que, ya lejos del estío,
y a las manos que trabajan
con cuerda, con hilo y guitarra,
sobre la masa del pan
que comen los hijos de las mujeres,
las hijas del universo
los que arrancan los espinos
que detienen nuestro paso lento
por el camino que nos lleva...
(revuelto, esquiva encina,
pendiente maldita, escarpada subida)
al pais que seguimos llamando libertad...
y las playas infinitas...
como el fondo de sus ojos,
atracados en bahías,
al resguardo de los soles
que destellan en su risa...

20080412

nostalgias

nostalgia azul, son
reflejos turquesa
del cuchillo que cortaba
el pastel de aniversarios...

nostalgia negra, son
tiempos donde los cantapuentes
alegatean por la paz
con mucha sinceridad...

nostalgia rosa, son
un regusto a fresa
al primer carmín prohibido
de aquel rubor sexual...

nostalgia gris, son
de eternas tardes plomizas
dando vueltas por las calles
buscandonos un portal...

nostalgia verde, son
alamedas brotando
tiernos poemas de niños
corazones en flor...

nostalgia amarilla, son
mimosas que no mimaban
colores ya sin cuaderno
las lineas desdibujadas...

nostalgia roja, son
banderas, banderas, banderas
la sangre de los amigos
la huella de nuestro amor...

nostalgia de unos ojos
que vienen algunos dias
a darnos la buenas tardes
con los colores del mar...

20080311

La escarpada subida

Decían los viejos aquello de: "dios mío, guárdame de mis amigos, que de mis enemigos me encargo yo"
Y yo, aunque no soy viejo ni, por supuesto, tengo en cuenta lo de los seres superiores, tengo que pensar lo mismo.
Después del desastre, siempre aparecen salvadores, antes nunca.
Bienvenidos sean, pero..., desde cuando se ha visto a los lobos guardar las ovejas.



L@s mism@s que nos llevaron al desastre,
a la apatía más cutre,
a la desmovilización y a la inopia voluntaria,
al gulag de las ideas para modernizar,
para ser más guap@s, más list@s,
más competitivos, más eco-de-todo...

Ell@s,
que siempre llevan leído el pronóstico
adecuado a la coyuntura,
la cita necesaria y sesgada de algún clasico
que ni comprenden ni respetan...

L@s hegemónic@s
que confunden a la inmensa mayoría
con "el Poder para hacer"
y "Hacer para poder".

Quienes ya no recuerdan que la Teoría Revolucionaria
siempre tiene su origen en la Práctica Revolucionaria.
Quienes creen que el fin -su fin-, merece cualquier medio.
Quienes olvidan a quienes y a qué representan.

Quienes olvidaron que para tod@s nosotr@s,
por encima de méritos cobardes,
insignias indignas y títulos burgueses,
el único capital que valoramos y poseemos
son nuestras manos...

Quienes nos utilizan
como mano de obra barata
y útil a veces.

Quienes imaginan que no pensamos,
que no soñamos, que no deseamos,
que no sangramos...

Aquell@s quienes crean que son
divinos, nuestros nuevos amos...

Se equivocan,
desde el fondo de nuestros ojos...
con los corazones remendados otra vez...
con la boca cerrada de dolor
o con las manos abiertas donde llevar todas las flores
o haciendo con nuestros cuerpos un montón inmenso, una rampa infinita
para que los que vienen detrás culminen -al fin, por fín-
la escarpada subida.

20080218

LOS JAVIERESMOYANOS

A ese jaguar que acecha el futuro
que -inevitable- vendrá.

A usted, que anduvo ya
por donde no alcanzarán mis manos.
A usted, que escribe a la manera moderna
con jóvenes palabras inusuales,
leales.
A usted, que gusta comprometer su pensamiento.

A usted, que se solaza viendo jugar niños.
A usted, que no juega al mercadeo, ni al escondite.
A usted, que no le duelen coplas
para exprimirse el corazón.
A usted, que baila y ríe y canta
a veces, a veces sin vallenato también.

A usted, que gasta un cabello que yo no tengo.
A usted, que armará su vida
con las traviesas del carril mas desolado.
A usted, que aún no sabe
cuán cerca están las estrellas
que alumbran nuestro común oscuro cielo.

A usted, que le conocí más triste,
yo más triste, usted más triste.
A usted, que no me vende paraísos lejanos
ni me habla de la muerte que acecha en las rutinas.
A usted, que vive justo en la mitad
del continente más doliente.

Usted, que es un arma peligrosa...
Usted, que hará hombres nuevos con el barro andino...
Usted, que derrumba los ídolos siniestros...
Usted, colombiano, mi hermano
-si es que se puede hermano de bit,
de voz, de esperanza lejana, de verso-

A ese jaguar que acecha el futuro
que -inevitable- vendrá.

A usted le debía unas letras...,
nomás para que sepa que no me he muerto,
nomás para que tenga la certeza
de que me importan los javieresmoyanos,
de que lo que realmente importa es la inevitable,
irreductible,
propagación de los javieresmoyanos del mundo...,
doquiera se hayen, doquier que hablen,
que no se callen, que se sepa que importan...

A usted, que le debía unas rimas pobres
-sin pagar del todo la deuda ni el rédito-

A usted, le saludo y le entrego, de nuevo,
alientos infinitos.

20080208

Beatriz alada

Beatriz es un arroyo
de orillas profundas.
Beatriz es un abrazo
de manos iracundas.

Ella sabe entretener
una tormenta en un vaso
sobre un arpegio velado,
en un silencio sonoro,
acoplando su mirada
con un grito desgarrado.

Beatriz es un letargo
feliz de sensaciones.
Beatriz es un miocardio
abierto a las emociones.

Ella coge los soles
de las noches mas oscuras
y las pone en un soneto
que los convierte en lunas
y en un verso soñado
las derrama una a una.

Beatriz es un repaso
de esas tardes queridas,
es un amanecer sonriente
en las calles de la vida.

Ella derrite el tempo
en el que van las palabras,
cada cuerda es una puerta,
cada traste una ventana,
su cuerpo es una guitarra
que te arrastra a los pecados

Beatriz es un cometa
que salta por los tejados.
Beatriz es una diosa
cubierta de repujados.

Ella es plata en la garganta
y almizcle en los asonados,
la hechicera que te arranca
los sueños adormecidos,
la ronquera de las penas,
los sones enamorados.

Beatriz es un repaso
de esas tardes queridas,
es un amanecer sonriente
en las calles de la vida.

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20080125

-itaca espera...-

de olvidadas travesias
de voz añeja y rota
vuelven timoneles que a las proas
de las audaces galeras
que abordan playas marinas
para oir cantos de las sirenas
de arenales que se añoran...

para cuando lleguen mis olas
a las arenas del mar
a las playas solitarias,
solas...
pasando van tantos dias,
tantas breves horas
no llevaran mensajes en traslúcidas vasijas
ni palabras de amargas horas

ni a la luna maldicen sus mareas
son las lunas
son las oceánicas mareas
son sólo las olas solas

cuando a las arenas llegan mis olas pelágicas...,
mareas que llegan,
mis olas solas...
no son cantos de sirena
son sólo olas,
rumores selénicos de las caracolas

para cuando lleguen mis olas
a las arenas del mar
a las playas solitarias,
solas...
pasando van tantos dias,
tantas breves horas
no llevaran mensajes en traslúcidas vasijas
ni palabras de amargas horas

ni a la noche que amaga
el suplicio de las auroras
ni es el sol que ahora no está
ni el brillo de las perlas
que quieren ser caracolas

no llevaran tampoco llamas,
luciérnagas de barcas
ni en la rompiente espuma
que se inflama y vuela
y se alza y muere en la ría alta
al esfuerzo de la corriente lasa

para cuando lleguen mis olas
a las arenas del mar
a las playas solitarias,
solas...
pasando van tantos dias,
tantas breves horas
no llevaran mensajes en traslúcidas vasijas
ni palabras de amargas horas

llegan olas que vienen y se van
a la orden de las lunas
mareas de caracolas...
aterciopeladas perlas
miríadas de millonarias bolas

van llegando los aromas y las conchas
sobre espumas, sobre barcas
que se desmoronan
como los soleados dias
que nacen tras las auroras
sobre las llamas que arrancan
gemidos que son escritos, palabras solas...
para declinar las voces de las largas horas

para cuando lleguen mis olas
a las arenas del mar
a las playas solitarias,
solas...
pasando van tantos dias,
tantas breves horas
no llevaran mensajes en traslúcidas vasijas
ni palabras de amargas horas

20070306

Poema para el ocho de marzo

Estuvieron volando toda la noche. Fueron miles
Sobre los tejados. Sobre los puentes
Las operarias, las obreras, las mujeres.
Sobre los primeros centenares de palomas
Sobre las primeras decenas de palomas
Sobre la primera paloma

Estuvieron volando mientras fué de noche
Palomas en lucha simplemente
mujeres dignas, como todas las mujeres

Palomas que volaron hacia todas partes
creando la solidaridad de las palomas.
Son innumerables en la continua noche
sobrevolando las fábricas que arden
con sus obreras dentro, encerradas

Vuelan y gritan de horror y de angustia
en la noche surgida del humo de la fábrica
surgida del criminal incendio provocado.

Y su vuelo perdura como el suceso repetido,
porque sigue habiendo mujeres
convertidas en palomas, en su lucha valiente
solidarias entre todas y con todas.
Palomas de todos los colores, de algodón,
de plástico, de todas las cosas
de cualquier cosa trabajada con las manos.

Por todas partes, a todos los sitios
Siguen volando, sobre montañas, sobre rios.
Siguen volando palomas, mensajeras, libertadoras.

20070224

yo no puedo viajar con el olvido

yo no puedo viajar con el olvido

por eso te pido: no me mientas

compañero, no hables con la boca

alimentada con duda y con dinero

no me pidas que viva con temores

renuncia tú sólo, que ya te rendiste

ve tu solo en el lujo del class-primera

yo viajo siempre con el dolor y el duelo

quien me acompañe también llegará

y aquí no hay sitio para el olvido

a mi no me avergüenza su color

ni su olor, ni su penoso ir viviendo

Modesto poemario de un hombre

Prólogo del contador:

Esto es, no le quepa duda, resumen y producto del desamor.

Usted siempre podrá pensar que se podría haber escrito algo mejor o expresado de otra manera, será cierto, pero no era esa la intención.

El contador opina que, puestos a abrir el corazón, también es menester exponer los infartos, las suturas, los by-pass y todos los demás remiendos que le han permitido vivir un poco más con alegría, mucho más de lo que usted imagine.

Y es por tanto necesario ver la importancia del matíz entre “amor mío” y “vida mía”, en cada momento relatado.

Cabe que se sepa que como todos los contadores de cosas éste, sin ser excepción, puede haber confundido unas cosas con otras y además ser muy benevolente con él mismo.

A menudo es más fácil conciliar las angustias y los sueños diciéndose a uno mismo que se ha sido impotente y no pensar en las cobardías que le han atenazado, opinión ésta mía última que me parece más que plausible.

Porque la vida todo nos enseña, a veces a destiempo, a veces anticipadamente, y eso no excusa nada pero si define que, verdaderamente, pocas veces sepamos cómo actuar ni cómo demostrar lo que se siente.

Luego, cuando no tiene remedio, sí que nos damos cuenta del valor verdadero de todo cuanto acontecemos, y así volveremos a errar en el siguiente paso.

Porque como todo, lo aprehendido hoy, ya no sirve mañana.

En eso, más que en ninguna otra cosa, consiste nuestra humanidad.

Tenga paciencia con este vate.

Hace lo que sabe pero no sabe lo que hace.

20060630

El Camino de Hierro (1)

-Todavía hay café frío en la cocina...
-¡Ah, vale! Larrea gira en redondo y se da por aludido y anda silencioso hacia los fogones.
Es casi adicto al café de su amigo.
Servido, vuelve en sus pasos y pregunta en voz alta: ¿Cuál es el Plan?

-No hay plan.

Se oye desde otro lado.

-¡Ah, vale...! Se repite
Me llamás y vengo, ¡Y no hay Plan!
Y que tenés en la bola. ¿Ah? ¡Mierda! Sos un loco desagradable...
¿Pensaste dónde anda el Uruguay, cuando hiciste tu llamada? ¡En otra dimensión! Y te ha costado plata, y mucha enjundia engatusarme y no tenés un plan... ¿De veras? ¿Ni uno chiquito para recomponerlo sobre la marcha...?
¿Qué hiciste de tu cabeza? Capullo engreido. ¡Me dirás que querias verme y brindar con ginebra por los viejos tiempos!

-Te digo que no hay plan. Ni grande ni chico.
-¡Bah! No te creo, pásame el gin.
¿Porqué yo, y no otro? Perdiste la agenda. Bueno, visto lo sabido mejor si que la perdieras... ¿Pero sabés dónde vamos luego, o tampoco?
-No hay plan, Pancho, esta vez no hay plan que valga, y por esto esta aquí el analista Larrea, porque no esta saturado de información y me dirá lo que hay que hacer. No hay plan, te repito.
-Me disculpo hermano. Pensé que llamaste al loco que conocimos hace algunos años... ¿Y qué podés decirme entonces?
-“M”

-¡Carallo! ¡Una mujer! ¡Sabía que era una mujer! Aquel tono pausado, cuando hablaste tan frío, pensando las palabras..., sólo podía ser élla, y qué: ¿Te declaraste, capullo?
-Ya sabes que no hace falta.
-¡Ah, claro, y por eso estoy aquí yo, para hacer el mapa del tiempo!
-Más o menos, Licenciado, tendrás que monitorizar un tiempo...
-¿Y Jan?
-No debe
-¿Porqué no “debe”?
-Porque Paola es su socia
-¡Ah! Eso si son palabras mayores. Paola, humm..., trágico para ti. Pero Jan puede hacer las cosas bien.
-No, Jan habla en sueños. No, no debe.
-Pues alístalo, como a mí otras veces...
-No Paola siempre ha sido la mejor. Seguro que ya sabe que estas aquí conmigo.
-Oye, eso de los espías se acabó ya...
-No para Paola.
-Y qué querés, entonces.
-No sé..., tú monitoriza y ya se verá.
-¿Y los otros qué dicen?
-Nadie sabe nada, sólo Paola...
-¡Puff, qué marrón! Esto me gusta, burlarme de la Gineta es un reto.
-No podrás. Serás un cebo fácil porque a Paola le pueden las distancias cortas, como en Venecia.
-¡Ya, si tú te lo crees...! Pero quiero probar algunos trucos.
-Tuyo es el trabajo, tu verás. Sólo recuerda que “M” no es el enemigo...

-¿Dónde viviré?
-En Catllús, a mitad de camino.
-¡Ya disimulando, eh!
-No. Comprarás y venderás madera, postes de teléfono, y tendrás un despacho aquí, en Manresa. Está todo en la lista: Tus amigos, tu bar, a Penélope...
-Gracias por el detalle, aunque podrías haberme dejado más margen...

-No lo tienes. Te conozco y Penélope también. Además en la Asociación encontrarás a un “amigo”, y a la hermana de “M”.
Hazte querer y luego nos vamos todos de vacaciones.
-¿Vacaciones en el Cadí?
-No, nos iremos con Gambino, a los Monegros, a pensar qué hacemos con nuestra vida...

-Detallazo nuevamente, filosofía sin mujeres. ¿Te convertiste al Platonismo o sólo follas tú?
-No, sólo pensar en el futuro.
-Vale, vale, bromista... ¿Qué hace Penélope ahora?
-Sigue fotografiando, creativa..., ordenadores y tal. Ahora ya sabe más que yo.
-¡No jodas!
-No jodo nada, Larrea. Es joven y aprende deprisa, aunque te tenga entre sus debilidades.

-Hablás de mí como si fuera una infección...
-Lo eres. Peor que yo, Pancho, y no nos damos cuenta. Enponzoñamos también.
-¡Hey, hey, cuidado amigo! Pásame el gin... ¡Pues es verdad..., tú me viciaste a la ginebra!
-¡Ya! Para todo lo demás no te hice falta. Además ayuda a caminar deprisa.

-¡Oye tú! No veo a la Musa en tu lista.
-¿Olga?
-¡No, a la Perestroika en persona! ¿Quién si nó?
-Olga no. Bebe vodka y ahora es feliz.
-Ya entiendo..., Jan no, Olga no, Amín sí, y añade a Paola pegada a su amiga Penélope y a mí. Pues para no ser un plan, se parece a la mitad de los tuyos.
Vamos, que está más claro que un verso de Benedetti...
-Si tu lo dices.
-Lo digo. Y según tú: ¿Qué debo averiguar que tú no tengas ya escrito en una ficha de cartón? ¿El horóscopo de su hijo, si lo tiene?
-Lo tiene.
¡Vés! ¿Qué te dije, cabrón? ¿Querés saber porqué tiene un hijo?
-Sí.
-¡Porque se le pasaba el arroz! Es hormonal.
A todas les pasa, y si no de bote o adoptado.
-¿Y porqué ahora?

-Ya se verá...
-¿Y porqué de ése?
-Porque no tendría otro más a mano.
-Le repelían los sosos.
-Ya, tu fuiste una harmónica quizá, idiota. Te digo que no tendría otro amano...
-Después de hablar conmigo...
-¡Seguro, macho! Le quedó claro que tendría que esperar diez años, como en el tango.
¿Tiene nombre de tango, recordás el chiste o no, pringao?
¡Para esto el viaje!
Si me lo contás me ahorro la visita...

-Tal vez, pero...
-¿Pero qué?
-A él lo tenemos fichado. Es del enemigo.
-¿Cuánto del enemigo?
-Desde la universidad, es un durmiente de Apollo.
-Apollo murió, recordás. En Llançà se puso a nadar dormido, ¿Ah?
-Si pero no su Antena. Y nunca vimos el cadáver.
-Vale, vale y que cosa le hace tan interesante... Para todos, quiero decir.
No sólo para ti personalmente...
-Josep y Pilar y él, son la Terna de Apollo.
-Bueno Josep está vivo porque tu quisiste, y Pilar está controlada ¿No?
También éste pájaro por lo que me cuentas.
Sigo sin ver el peligro.
-Trabaja en Castellet.
-¡Ah! ¿Y?
-Castellet es un nido.
-¡Claro, y Manresa también. Y Súria!
-No. En Castellet está Fénix.
-¡Hey, para! ¿Fénix? ¿Visible?
-No, visible no, no todavía.
-¿Y Fénix está al corriente de estas zarandajas tuyas?
-Lo está.
-¿Y qué dice?
-Que haga lo que tenga que hacer.
-Pues vamos allá.
-No.
-¿Cómo “no”? ¡Sí, fuera problemas!
-No, él no va amorir de un ataque al corazón, ni Josep del sida, ni Pilar tendrá un cáncer fulminante.
Esto es el “pequeño juego”. Apollo lo sabía y puso a la Terna en mi camino...
-“Resolvamos”
-No.
-Oye, hombre. Muchos “no” para una mañana de febrero. Resolvamos “ya”.
-No.
-¿Porqué no?
-Por que tiene truco, yo lo haría así...
-Tal vez, comprobemoslo.
-Comprobemoslo de otra manera...
-Ya, a tu estilo.
-Siempre hay otros caminos...
-Ya. El viaje es el camino.
Puedo citar a Atila en casi cualquier respuesta.
-Tú, Larrea, me pusiste el nombre. Premonitorio.